El individuo se caracteriza por tener un carácter singular e irrepetible y por ello es irreductible a los otros individuos con los que guarda relación. Por su parte, la colectividad hace referencia a un grupo de individuos entre los cuales existen relaciones de comunicación determinadas.
Para Hobbes, en su Tratado sobre el ciudadano, la colectividad, entendida como sociedad, es una asociación basada en las necesidades humanas y el temor, por ello es reflejo de las relaciones humanas de utilidad recíproca.
Por otro lado, Kant, en su texto Ideas para una historia universal en clave cosmopolita, afirma que el hombre tiene una inclinación a asociarse porque siente que puede desarrollar mejor sus disposiciones naturales estando en una sociedad; sin embargo, también se inclina a aislarse porque la insaciable búsqueda de su propio beneficio hace que encuentre resistencia por todas partes y que él, a su vez, oponga resistencia al egoísmo de los demás.
Paola Rochón (@paolarochonherrera)
Y pese al tiempo seguimos actuando igual que razón tenían esos visionarios y me da la impresión de que estos son los nudos que tendríamos que aprender a desatar para evolucionar